UN JUEZ RURAL 131 fandose con el polizon parado—-como una avispa pronfa a clavar su aguijon, la muchacha del colorefe. iVean la senora cumplida! y su casa es un paradero publico, y la remolienda arde del Dieciocho a la Pascua, y de la Pascua al Dieciocho; y se lo pasa borracha, y grita, y arma cada escandalo.. .Bastaria que el juez le mirase el ojo salfon! —-Que se calle la cochina malhablada— grifo la ofendida—|Que infame! Y la viejecilla pastoril regresando de su aire lejano en una risilla punzadora, dio un salivazo, y despejada su boca lamentable, lanzo un agudo y silvante torrente de injurias. La mujer que aun afirmaba sus manazas en las rodillas como para contenerse, no pudiendo mas, salto a la liza con voz de trueno, pronta a acometer a trompadas. —Usia ordenara.. insinuo molesto el secretario. —No, no—dijo conteniendolo Solaguren— iQue espectaculo!—y pensaba—|No estar aqut Mozarena!

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