UN JUEZ RURAL 61 premafuramente amarillas y moribundas, esa antigua mansion tenia un atractivo poderoso. Ai abrir su caja, disponiendose a pintarla, vio con desagrado que Mozarena, a tres pasos de disfancia, sentado en el mismo talud, se disponia a hacer otro tanto. Los pintores creen adquirir cierta propiedad sobre el tema que eligen. Por primera vez comprendio Solaguren que tenia sus inconvenientes el lievar como compafiero a una persona de gustos tan semejantes a los suyos. Pronto la belleza que se le ofrecia, y el ardor y ensimismamiento que traen consigo la ejecucion pictorica, le sumieron en profundo olvido, y no supo de cosa alg'una que no fuese la alegria de la voluntad creadora. Dos horas despues, al dar su trabajo por concluido y volver penosamente a la realidad compleja, sintio con gran' extraneza que sus miembros, antes insensibles y lejanos, volvian hacia ei adoloridos; y supo que su amigo olvidado encarnabase en esa sombra erguida sobre el talud.

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