UN JUEZ RURAL 87 ladron! iTiene esto sentido? Tu ique experimentas? —Yo soy pobre. —Pobre idices? —Bien lo sabes. —Pero tu pobreza es relative; para esas mujeres eres un Creso. Hablo de la miseria. •. Llegaban al camino de El Arenal y tras la linde de los alamos, en un largo trecho, donde la zarzamora habia sido quemada y los troncos vetanse negros y las hojas secas y amarillas hasta gran altura, divisaron un extenso frutillar. Mujeres vestidas de bianco, inclinadas sobre los surcos, cogtan las frutillas. El sol dabales de lleno; las sombras azulinas y transparentes de los blancos vestidos, los verdes pampanos y las flores campestres que adornaban sus amplios sombreros, tratan el recuerdo, en ese vasto escenario cercado de alamos oscuros y rumorosos al viento, de otra vida y de otros tiempos; tiempos llenos de abundancia, vida de alegria pagana!
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