UN JUEZ RURAL 13 lentamente a su tranquilidad. Entristecido, sentiase injusfo con sus hijos. Trato por dos veces de hacerles olvidar su castigo con historietas alegres; pero los chicos fingieron estar sordos. Descontento consigo mismo, miro en derredor y vio un largo sobre apoyado contra un florero, alii, al alcance de su mano. Era el sitio en que acostumbraban dejarle la correspondencia. Lo abrio displicente; mas, cuando sus ojos recorrieron el pliego que el sobre contenia, una sonrisa indefinible se insinuo en la comisura de sus labios. —dQue es?—pregunto su mujer, que espiaba su rostro. —Lee—dijo Solaguren, y le alargo el escrito. —iPero tu no aceptaras? Una nueva molestia que te echarias encima. iComo! iTe ries? iCuando vas a escarmentar? <j.Te olvidas de tus arrepentimientos? iQue mala memorial Pronto estarias nervioso con esta nueva gabela. —No, mujer—exclamo Solaguren—si no acepto. iMe crees loco? Yo, juezl... Aunque...

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